Capitulo IV "Como ejercer la Autoridad"

La autoridad es necesaria para poder educar distinguimos 2 formas diferentes de ejercerlas:

El autoritarismo:

Cuando el objetivo de su ejercicio es de servirnos a nosotros mismos.

Por ejemplo:

-       El padre que envía a su hijo a dormir antes de la hora para que pueda ver televisión tranquilo.

-       La madre que, sin un motivo suficiente, castiga a los hijos para poder hablar con una amiga.

-       Padre que manda callar a sus hijos, solo con el fin de que no lo molesten.

-       Cuando se dan órdenes en beneficio de uno mismo sin un fin educativo.

-       Cuando se dan órdenes “porque sí”, sin dar razones.

La autoridad-servicio:

Cuando el objeto de su ejercicio es el servicio a los demás. Esta es la que cumple la misión de poder educar.

La autoridad será más eficaz cuanto más se apoye en el ejemplo, que los hijos vean que los padres luchan por ser mejores y muy especialmente en los mismos objetivos que exigen a sus hijos.

La autoridad es un servicio en el desarrollo personal de los hijos, que abarca principalmente los sectores en los que los padres luchan por mejorar.

Los conceptos de libertad, responsabilidad, obediencia y motivación son muy importantes en este tipo de autoridad.

Ø  Libertad y responsabilidad

Una persona decide libremente hacer un acto bueno y es responsable cuando realiza el acto.

“No solo basta querer ser bueno sino lograr serlo.”

La autoridad nos ayuda a hacer que los hijos actúen bien y adquieran los hábitos necesarios para su formación.

Ø  Obediencia

 Es el hábito más directamente relacionado con la autoridad y el primero que debemos conseguir.

“No hay educación en la responsabilidad sin una educación en la obediencia”

Debemos presentarla a nuestros hijos como un fenómeno universal que debe ser vivido por todos los niños, adolescentes y adultos, actuando con libertad, es decir, con sentido común, con iniciativa personal y con afán de servicio.

Enseñar a obedecer supone enseñar  servir en lo poco y en lo mucho, en lo pequeño y en lo grande.

Es muy importante enseñar a obedecer en cosas pequeñas.

La autoridad y la obediencia requieren un clima de confianza:

·         Confianza en ser obedecidos.

·         Confianza en las posibilidades de cada hijo respecto a la tarea de que se le responsabiliza.

·         Confianza en que sabrá pedir ayuda si la necesita.

·         Confianza e que sabrá elegir el mejor procedimiento para hacerlo.

·         Confianza en que mañana será más responsable que hoy.

Ø  Motivación

En el ejercicio de la autoridad surge la desobediencia, hay que ayudarnos con la motivación, es necesario convencer a la persona que necesita obedecer y que obedecer es bueno para ella misma.

Hay 3 clases de motivación:, según el medio que se utilice:

Material.- es con premios y castigos.

Intelectuales: cuando se dan razones intelectuales para mover la voluntad a buscar la verdad.

Moral.- supone dar razones a la inteligencia para que la voluntad, libremente, busque el bien.

¿Sabemos ejercer la autoridad?

Para saber si ejercemos bien la autoridad debemos cumplir con cada uno de los 5 puntos básicos de la autoridad:

·         NO GRITAR cuando damos una orden.

·         NO REPETIR las órdenes para que las cumplan.

·         NO PERDONAR los castigos impuestos.

·         NO CASTIGAR sin avisar antes la clase de castigo que se impondrá.

·         NO AMENAZAR con “Cuando venga papá… ”.

Los hijos se acostumbrarán a ser gritados y a que les repitan las cosas y no por eso terminarán obedeciéndolo mejor.

A los hijos hay que perdonarles siempre, como personas que son,, y demostrarles que los seguimos queriendo, aunque se porten mal, pero los castigos deben ser cumplidos siempre.

Antes de imponer un castigo es necesario avisarlo, los hijos deben saber qué castigo se les va a imponer si no obedecen. Recibir un castigo sin previo aviso, se considera una injusticia eso es lo que desprestigia la autoridad.

“Los padres deben reforzarse la autoridad mutuamente. El padre debe reforzar la autoridad de la madre y la madre la del padre”

Cuando uno contradice las órdenes del otro, está dañado directamente su autoridad.

Ø  Igualdad y autoridad

No se debe ejercer del mismo modo la autoridad con todos los hijos, pues cada uno de ellos es diferente ya sea por genética, por su construcción psicológica, por los estímulos recibidos, por su carácter, por su temperamento, por tener diferente edad o sexo, etc.

Ejercer la autoridad con todos los hijos es injusto.

Un pequeño castigo o premio será suficiente para hacer cambiar la conducta de un hijo muy sensible. No causará ningún efecto en otro.

No se deben establecer las mismas reglas para todos, el hecho de tener diferentes edades hace necesario estableces reglar distintas.

Ø  ¿Cómo ganar autoridad?

Solamente se adquieren los hábitos cuando se actúa libremente en actos repetidos. Para educar con eficacia es necesario promover actos libres.

Consejos para ganar autoridad:

1.   Cumplir con cada uno de los 5 puntos básicos para una buena autoridad (indicador anteriormente).

2.   Exigir obediencia co autoridad en pocas cosas; al principio en cosas fáciles de cumplir para que se den cuenta del cambio de actitud en los padres, a partir de los 3 años y a su nivel de comprensión es aconsejable comentar con los hijos el cambio e actitud.

3.   Antes de exigir la obediencia en un caso concreto, se les debe motivar para que obedezcan a la primera, explicarles las necesidades y ventajas  que supone para ellos obedecer

4.  Si obedece, debemos reconocerle que se ha portado bien para reforzar que otra vez tienda a repetirlo. Si no obedece a la primera debemos pensar si hemos motivado de la manera adecuada sino intentarlo nuevamente.

5.   Cuando una motivación razonada no ha dado resultados se pueden establecer unas reglas de premios o castigos para reforzar la motivación.

6.   Si se obedece, se le reconoce. Si no lo hace se deben cumplir las reglas establecidas. Si a pesar de todo, sigue sin obedecer, puede ser debido, principalmente, a dos causas: que eel castigo no sea el adecuado y prefiera desobedecer y cumplir el castigo, o que por su terquedad no quiera cambiar de actitud.

Apreciaciones del grupo: 

♫ Barnic Ciqueyros: 

Este capítulo en lo personal me parece de suma importancia pues por lo general observamos casos en los que los padres confunden estos términos y son autoritarios con sus hijos sin darse cuenta y pensando que lo que hacen es correcto, ser considerado “la autoridad” consta de varios componentes para lograr que el niño haga las cosas por sí mismo sin necesidad que le estén mandando a cada momento ni recibiendo castigos o premios eso es lo que se quiere lograr.

♫ Edith Avila: 

Como educadoras que vamos hacer debemos saber que infundir miedo en los niños no es darse y ejercer autoridad sobre los niños.

lo que se quiere dar a entender es que ejercer la autoridad es luchar por ser mejores y así mismo transmitir ya sea a los alumnos o hijos; y esto a su vez esta ligado con la responsabilidad, obediencia ,etc.

 

♫ Giannina Canta:

Primero que  nada motivando a los hijos adquiriendo buenos hábitos necesarios par  una buena formación junto a ello esta la responsabilidad, la obediencia. Ejercer una buena  autoridad es sin gritar a los hijos ni repetirles las ordenes, menos amenazarles.

Recuerda  que los hijos se encuentran mas seguros y felices, en un hogar en donde se establecen reglas.

 

♫ Sandy Alvarez:

La autoridad es una herramienta de la voluntad, necesaria para poder educar, pero debemos tener en cuenta

los adultos se debaten entre mostrarse firmes ante los hijos o permitirles hasta el más mínimo capricho, solo por el temor a que no los quieran más. Lo primero que hay que tener bien en claro, es que enseñar a obedecer se aprende solo cuando quien manda u ordena, lo hace de manera equilibrada y coherente.

Es muy importante crear el acto de la obediencia en los niños desde muy pequeños, y este hábito esté acompañado por el deseo de lograr hijos independientes y responsables, tanto en la niñez como en su adultez.

 

♫ Claudia Chavez:

La autoridad es necesaria para poder educar pero debemos reconocer que hay dos tipos de autoridad una de ellas es la autoridad-servicio: es cuando el objeto de su ejercicio es el servicio a los demás pero también tenemos otro tipo que es el autoritarismo: es cuando el objeto de su ejercicio es el servicio a uno mismo. Como podemos darnos cuenta la única que cumpliría con la misión de poder educar es la primera  la autoridad – servicio.

Para que una autoridad sea eficaz debe ser apoyada con el ejemplo. Es decir la mejor manera de ejercer autoridad es que los niños vean que los padres se esfuerzan por cumplir los mismos objetivos que les pedimos a ellos.

 

♫ Melissa Barreto:

Para que los padres tengan autoridad los hijos tienen que ver que ellos luchan por ser mejores. La autoridad nos ayuda a hacer que los hijos actúen bien y adquiriendo los hábitos necesarios para su formación.  Para que sea satisfactoria la autoridad es necesario la libertad, responsabilidad y sobre todo la obediencia, ya que esta obediencia y autoridad están muy relacionados, y si hay desobediencia, será muy difícil acceder a la autoridad y si se llega a perder esta autoridad, tenemos que recorrer a la motivación y la mejor manera de motivarlos es dándole tiempo, cariño, amor. 

♫ Lilian Ayala:
Ser autoritario es una actitud tomada por los padres frecuentemente ellos lo son sin mala intensión lo correcto sería representar la autoridad en casa y fortalecer las acciones buenas de sus hijos para lograr que desarrollen buenos hábitos para su vida.

 

 

♫ Grace Briceño:
Como bien lo han dicho la autoridad es necesaria para poder educar ya que este posee dos tipos que es la de servicio y el autoritarismo. Por ello es que se tiene que tener en cuenta es que enseñar a obedecer se aprende solo cuando la persona quien lo manda lo hace de una manera equilibrada.

Es por esto que para formar a personas con valores y buenos modales debemos inculcarle lo que es la obediencia desde muy pequeños.